La polémica de la traducción de Pokémon en español de España y Latinoamérica
Estos días, tras la salida de Leyendas Pokémon: Z-A, la polémica está servida en las redes. Por primera vez, un juego de la saga principal de Pokémon ha desdoblado su traducción en español, diferenciando entre la lengua que se habla en España y la que se usa en Latinoamérica. Este paso solo se había dado, hasta ahora, en Pokémon GO y en Pokémon TCG Pocket, donde los nombres de los ataques, los objetos y ciertas expresiones de los personajes son radicalmente distintas.
La intención de esta nueva traducción para los fans latinos es acercar el juego a ellos, haciendo que su lenguaje sea más familiar para los jugadores de esa región. Esto tiene todo el sentido del mundo si pensáis que en Latinoamérica hace ya muchos años que conviven dos «versiones» de Pokémon radicalmente distintas: la de los juegos, con un lenguaje marcado por la traducción española, y la de la serie, que goza de gran popularidad en la zona y fue traducida en México, incluyendo muchos cambios con respecto a los juegos de las mismas generaciones.
Esto suponía un choque del cual era difícil escapar. Por un lado, en los juegos los primeros Pokémon de tipo Fuego usaban «Ascuas», mientras que la traducción de la serie, hecha directamente del inglés al latino, cambiaba «Ascuas» por «Brasas». Ejemplos como ese hay muchos y eso, sumado a los modismos españoles incluidos en la traducción de los juegos, generó todo un movimiento en redes, en el que los fans latinos pidieron una traducción propia para los juegos. Al mismo tiempo, en los juegos donde sí se hicieron estas modificaciones de traducción, los jugadores que llevaban años acostumbrados al vocabulario propio para los ataques o los objetos se sintieron confusos al tener que adivinar después de tanto tiempo a qué correspondía cada cambio.

Ahora que la saga principal de Pokémon también ha recogido esta realidad lingüística tan diferente, el debate se ha reavivado. Entre latinos encantados por librarse de las expresiones como «chachipiruli» tan arraigadas en España, los mismos latinos quejándose de que hay ciertos términos (como los nombres de las Poké Balls) que no debieron cambiarse, y los jugadores preocupados por la dicotomía del lenguaje en una comunidad única, la pugna está más activa que nunca.
Pero la realidad es: ¿Hay alguien que tenga razón? ¿O nos estamos metiendo en una pelea como la clásica disputa de «cuál es el mejor doblaje» de la animación?
Desde aquí, nos alegramos por nuestros vecinos latinos, porque puedan disfrutar del juego en igualdad y consonancia con lo que disfrutan en el anime, y os preguntamos a vosotros: ¿creéis que la traducción al español latino en Pokémon era ya necesaria? ¡Os leemos!





Siento que era algo que debería estar desde los inicios así como el anime tenia la tradición